La presencia de Mendy López hizo mejorar a Caimanes de Barranquilla

Del extenso grupo de dominicanos diseminados al menos en cuatro de las naciones visitantes en la Serie del Caribe, existe uno de gran trascendencia e historia en el béisbol invernal: Mendy López.
Claro, no en su condición de pelotero activo, pero Mendy funge como el instructor de bateo de los Caimanes de Barranquilla, conjunto que ingresó a la tercera fecha con foja invicta de 2-0.
Mendy, cuyos 61 jonrones en la historia del béisbol dominicano, segundo solo detrás de Juan Francisco y miembro de cinco equipos campeones de las Aguilas, le merecieron ser instalado en el Pabellón de la Fama del deporte en el país en el 2020.
Dueño de un average de .257 en el pasatiempo local, López fue contactado por la directiva de los Caimanes tras culminar las primeras tres semanas del campeonato en esa nación, conjunto que necesitaba con urgencia mejorar su ofensiva.
Miembro del equipo de instructores de los actuales monarcas, Gigantes del Cibao, el exjugador recibió el permiso para empacar su equipaje e irse a esta experiencia en el béisbol colombiano, puesto que también asume con los Piratas de Pittsburgh, organización en la que labora desde hace varios años.
“Ellos se comunicaron conmigo y me externaron que si podía ir allá y unirme al equipo y tras recibir el visto bueno decidí hacerlo”, expresó López, quien agradeció de manera infinita a los Gigantes el haberle otorgado el permiso.
“Cuando llegué a los Caimanes, el conjunto no estaba jugando bien y gracias a Dios pudimos enderezar y al final levantar la corona”, agrega el exjugador, quien militó durante 14 campañas en el béisbol invernal, 12 de estas con las Aguilas.
Caballeroso y entregado siempre a las causas de sus equipos, López recuerda que para entonces el club no jugaba para .500 y luego se metió en una buena racha positiva que le permitió ubicarse en los primeros puestos.
Aunque López no asume protagonismo por el éxito, lo que si indica es que ayudó a algunos bateadores a mejorar con la estaca.